Todos somos conscientes de cómo los métodos de la agricultura industrial destruyen los recursos naturales. Además, muchos de los costos de producción se externalizan, es decir, que lo terminamos pagamos por otros medios. Los costos ocultos incluyen el agotamiento de los bosques tropicales, el agua dulce y la tierra fértil; la contaminación con pesticidas, herbicidas y el cambio climático. Todo esto significa que la producción de alimentos es mucho más costosa que el precio que uno paga en el supermercado.
La Spirulina puede ser cultivada en suelos infértiles, no aptos para la mayoría de los cultivos convencionales. El contenido de proteína en la Spirulina es del 60% al 70%. Esto es superior a cualquier otro alimento, Los rendimientos de proteína por hectárea son 20 veces mayores que los de la soja, 40 veces más que el maíz, y más de 200 veces más que la carne. La Spirulina no requiere tierras fértiles, por lo que su cultivo, tampoco genera desgaste en los suelos.
La Spirulina utiliza mucha menos agua por kilo de proteína que otros alimentos. El agua se recicla de nuevo a las lagunas de cultivo después de la cosecha. Los estanques están sellados, poca o casi nada de agua se filtra hacia el suelo. Solo se pierde agua a través de la evaporación en los estanques a cielo abierto. La producción de proteína de espirulina usa el equivalente al 25% del agua necesaria pare el cultivo de soja, el 17% del maíz y sólo el 2% del agua necesaria para la proteína de carne vacuna. Sólo son necesarios 23 litros de agua para una porción de 10 gramos de Espirulina, mucho menos que 57 litros para una porción de pan, 246 l para leche, 515 l para huevos, 1544 l para pollo, y 4932 litros para una hamburguesa.
La Spirulina requiere menos consumo de energía por kilo que cualquier otro alimento proteico. Su eficiencia energética en la producción es 5 veces superior a la soja, 2 veces mayor que el maíz, y más de 100 veces superior a la carne vacuna alimentada a grano. Dado que los recursos energéticos baratos desaparecen, los costos de los alimentos que dependen de abundante energía están aumentando dramáticamente.
Los bosques ayudan a absorber el dióxido de carbono atmosférico. Los árboles pueden absorber 1 a 4 toneladas de CO2 por hectárea, por año. La Espirulina es aún más eficiente, puede llegar a fijar 6,3 toneladas de carbono por hectárea al año. Esto produce 16,8 toneladas de oxígeno durante el mismo período de tiempo.
La alga Espirulina y tal vez otras microalgas como Chlorella, pueden ofrecer un superalimento, sin destruir los valiosos recursos de nuestro planeta. Como la producción de Spirulina se expande en las tierras infértiles, entonces se podría dejar de talar y perturbar los bosques naturales para producir alimentos nuevos. Las tierras de cultivo convencionales pueden volver a su estado natural de bosques, selvas y praderas. Cuanta más gente coma más abajo en la cadena alimentaria, se podrá detener la destrucción de la naturaleza, y ayudar a reverdecer nuestro planeta.
Fuente: Earthrise
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